Eduardo y su cuñado Sabonis acaban de meter la pata en uno de sus negocios y necesitan mucho dinero para superar la situación. Será Sabonis quien encuentre la solución al problema secuestrando a Modesto, cuñado de Alicia Zamora, la empresaria que les engañó y los dejó tirados. Solo hay un pequeño problema: Alicia no piensa pagar ni un euro por su cuñado. Será el propio Modesto quien urdirá un nuevo plan con el que Eduardo y Sabonis podrán salvar la bodega familiar. Estos tres cuñados lo tienen todo para fracasar, pero como diría Sabonis, malo será.